Blended learning y cómo puedes aplicarlo

Blog / Noticias | 30-03-22

Todo aquel que esté relacionado con el aprendizaje -ya sea porque está estudiando, trabaja en el sector de la educación o está involucrado en el aprendizaje corporativo- ha oído hablar del blended learning, también conocido como b-learning. ¿Por qué se promueve tanto? ¿Qué tan complicado es? ¿Y cómo se puede aplicar de la mejor forma posible? En este blog hablamos de ello.

La pirámide del aprendizaje

El blended learning consiste en combinar diferentes formas de aprendizaje, especialmente online y offline, y conectarlas a la perfección. El éxito del blended learning puede explicarse mediante la «pirámide del aprendizaje» (véase la imagen). Esta pirámide describe una serie de métodos de aprendizaje, como la lectura, el visionado de vídeos, la escucha de conferencias y la asistencia a talleres prácticos. Según el modelo, cuanto más esfuerzo tenga que hacer una persona para aprender, más información recordará. Escuchar es más pasivo que un taller práctico, y hacer una presentación sobre un tema es mucho más intenso que limitarse a leer un libro. Cuanto más activo sea el método, más «puntos» se obtendrán de la pirámide.

Menos Más es más

En realidad parece bastante sencillo: reemplazar toda la formación presencial y las conferencias por talleres prácticos y listo. Desafortunadamente, esto no se consigue tan fácilmente. Estudios demuestran que recordar y reproducir la información es más fácil cuando se alternan las formas y los medios mediante los cuales la transmitimos. El cerebro crea entonces más conexiones, por lo que la información se recuerda mejor. En una situación ideal, no solo se haría un taller práctico, sino que se ofrecería material de lectura, un vídeo, luego un taller, y después un debate con otros estudiantes. Fantástico, pero probablemente poco realista en términos de tiempo y costes. Entonces, ¿cómo podemos hacer que el blended learning sea más factible? 

Intenta añadir la mayor variedad posible dentro de los límites que tengamos. A continuación, planteamos algunas sugerencias:

  • Lo audiovisual funciona. El audio atrae a una parte diferente del cerebro de la que atrae lo visual. Por eso, mirar algo mientras escuchas es más efectivo que abordar solo la parte visual del cerebro. Intenta combinar ambas cosas para sacar más partido a las formaciones.
  • Los elementos deben reforzarse entre sí. Añadir una imagen a un texto es el ejemplo más sencillo de agregar variedad al contenido de aprendizaje. Puede parecer simple, pero esto ya hace que el efecto de aprendizaje sea mayor que si solo aparece texto. Pero… una imagen colocada con el único fin de alegrar las cosas puede ser una distracción, así que asegúrate de que se trate de algo útil y relevante. ¿Alguna vez has atendido a alguien que lee una presentación aburrida directamente de las diapositivas? Lo más probable es que la respuesta sea «no». Así pues, debes combinar los elementos.
  • Haz que la gente trabaje. Puedes hacerlo tan complicado como quieras. Desde un taller en línea hasta una simulación completa de la vida real. Puede ser tan sencillo como pedir un resumen después de una formación presencial, o poner a disposición de los asistentes cuadernos y bolígrafos durante la formación y prescindir de ordenadores portátiles y teléfonos. Si las personas escriben a mano durante la formación en lugar de hacerlo a máquina, tendrán que sintetizar la información a las ideas centrales. Es posible que se pueda seguir el ritmo mientras se teclea, pero nadie escribe a mano tan rápido como al hablar. Escribiendo, la gente tiene que escuchar y sintetizar inmediatamente la información más importante. 
  • Haz preguntas. Piensa también en el aprendizaje basado en la evaluación. No te limites a que los alumnos lean de forma pasiva, sino que piensen activamente en el contenido a través de preguntas. Esto aumenta el esfuerzo para pensar detenidamente, aplicar el material de inmediato y aprender directamente de las respuestas correctas o incorrectas. Si, además, utilizas distintas formas de plantear preguntas sobre elementos del contenido de aprendizaje, también estará añadiendo valor al efecto de aprendizaje.
  • Un debate hace maravillas. Se puede hacer de manera que ni siquiera suponga un gran esfuerzo. Si reúnes a varias personas (aunque sea a través de Zoom), y preparas unas cuantas preguntas o propuestas, ya tienes todo listo. Haz que los participantes del curso hablen entre ellos sobre lo que han aprendido recientemente, o incluso antes de empezar el curso. 

Estos son solo algunos ejemplos sencillos. Hay, por supuesto, otras innumerables formas de aplicar el blended learning. Lo cierto es que el blended learning funciona y ofrece excelentes resultados. La clave está en la variedad, siempre que todo lo que incluya aporte realmente un valor añadido. Intenta incluir elementos online y offline en particular, como una combinación de aprendizaje en línea y un debate en la vida real. Alterna diferentes métodos en la medida de lo posible para obtener el mejor rendimiento del aprendizaje.

 


Drillster y el blended learning

¿Cómo encaja Drillster en un curso semipresencial? Drillster se puede utilizar en todas las fases de un curso o estudio. Antes de una reunión presencial, con el fin de conseguir un determinado nivel de conocimientos. Durante un curso, para lograr que los alumnos trabajen activamente con el material y utilicen los resultados en clase (flip the classroom). Y al finalizar el curso, para retener y asimilar los conocimientos.